Chiquita piconera: Entrevista a Mey Montero
noviembre 04, 2024Saliendo de la proyección de la selección oficial de cortos del festival de cinema Jove de Barcelona U22, en la puerta de la fundación Joan Miro me encontré con Mey Montero, directora de uno de los cortometrajes proyectados en la sesión.
Su cortometraje Chiquita Piconera narra, desde la profunda oblicuidad del dolor y su efervescencia en el cuerpo, la relación entre una madre y la ausencia de su hija. Donde el flamenco encarna el puente que teje la memoria y el presente.
Hablamos un rato y pregunté por su proyecto:
¿Qué aprendizaje te deja el proceso creativo de hacer Chiquita Piconera?
Creo que el mayor reto, y a nivel de aprendizaje, lo que me llevo es que tienes que ser realista con los medios que tienes y con el equipo que tienes y con lo que puedes llegar a exigerle al corto. Porque yo fui como muy al límite. Yo creo que si hubiera metido un plano más o una secuencia más, o si hubiera alargado un poco más algún diálogo, se me podría haber caído el corto. Pero porque en rodaje eran dos jornadas y teníamos muchísimas limitaciones de tiempo, y de presupuesto ni te cuento….
Entonces, fue una manera de medir muy bien cuánto tiene que durar cada plano (también teníamos limitaciones de metraje). Entonces, casi que tenía ir como con un script y un cronómetro para que no se me fuera de tiempo y para que todo pudiera montar bien. Aunque tuviéramos esas limitaciones, creo que ha salido el corto lo mejor que pudo haber salido por eso.
¿Por qué tenían limitaciones de metraje si grabaron en digital?
La escuela nos ponía limitación de tiempo de metraje. No nos podíamos exceder de 10 minutos. Y si te excedías un minuto más te restaban en puntuación. El corto es 11:59 por eso. “Vale, pues este plano nos tiene que durar esto”. Realmente era como montar desde antes. Hay que llevarlo todo muy mascado.
Como había mucha coreografía entre las actrices y bailarinas, teníamos ensayos a los que iba todo el equipo. Era como restaurar un plato, poner las marcas en el suelo de absolutamente de todos los objetos y medir bien las distancias. Estábamos tanto el dire de foto como los coreógrafos. Tenerlo todo muy bien medido porque en rodajes íbamos atropellados, íbamos casi a toma única.
¿Chiquita Piconera es cine social? ¿Lo consideras como una película que se inscribe en una lucha social?
Es curioso que lo preguntes porque yo creo que no y, sin embargo, lo han programado en festivales de cine social. Me lo he planteado con el corto ya realizado: ¿qué papel social juega un corto que realmente trata sobre el luto? Y es verdad que el corto habla más de la experiencia humana del duelo, del amor de madres a hijas, la ausencia... Pero yo creo que también está vinculado socialmente a la manera que tenemos de relacionarnos entre nosotros como cultura.
¿Como ha sido el proceso de distribución? ¿Cómo llegaste hasta el festival U22?
Ha tardado bastante en llegar a festivales. Estuvimos desde septiembre hasta mayo (2023), 6 meses esperando sin que nos llegaran noticias de festivales. Se estrenó en el festival de Alicante y ahí ganó el premio mejor dirección. Ahí arrancó y luego han ido cayendo más festivales porque al final del verano también es la época. De repente nos han caído premios y ganamos en Astorga el segundo premio al mejor corto y mejor interpretación. Luego en el festival de Navarra el NIFF de Oro a New Generation, luego en el Not Film Fest (Italia) también la mención a mejor dirección. Estamos con la distribuidora Moira Pictures, que es de la propia escuela. Entonces la TAI (Escuela Universitaria de Artes, Madrid) escoge a 10 cortos de la escuela y los distribuye durante un año.
Ahora justo está terminando este proceso de distribución. Lo han mandado más o menos a alrededor de 100 festivales y en la mayoría no ha quedado seleccionado.
¿Alguna vez has hecho la distribución de un proyecto tu sola?
Sí, el año pasado estuve aquí también en el U22. Un cortometraje que auto-distribuí. Quería moverlo pero no tenía dinero para contratar una distribuidora. Entonces lo que hice fue pagarme la tarifa plana de Festhome que son 70 euros por un año y lo mandé a todos los festivales que tenían tarifa gratuita. Y de ahí llegó a bastantes. No fueron festivales muy grandes pero igual a 20 sí que ha ido.
¿Cuánto costó el proyecto? ¿Cómo se financió?
La TAI nos ofrece 600 o 700 euros por proyecto para los estudiantes del último año del grado. Todos los cortos se tienen que ceñir a ese presupuesto sin excederse. Tuve que pedir muchos favores. Al final es verdad que como son dos jornadas, no tienes tanto gasto. El equipo también pidió favores, no solo yo. Pedimos favores a todo el mundo.
Vemos como la industria del cine se maneja dentro de unas dinámicas de poder que giran alrededor del dinero. Es decir, el concepto de favor no existe tanto en la industria. ¿Te gustaría estar en un lugar en el que se pague todo?
Claro, por supuesto. Por eso estoy haciendo los cortos ahora, en realidad. El otro día leí un artículo muy interesante del colectivo Los hijos. Hablaban precisamente de esto. Pareciera que ahora el cine también se está devaluando, precisamente porque estamos empezando a demostrar a la industria que podemos hacer cosas buenas y baratas. No me gusta la palabra producto, pero es que de cara a la industria lo es. Entonces, que puedan sacar rendimiento o puedan explotar una obra que se ha hecho en base a un presupuesto limitadísimo también es un problema, yo creo, ¿no?
Pero bueno, mi intención es hacer ahora estos cortos para poder hacer rodajes en los que no ocupéis favores y en donde podamos ir todos a rodar tranquilos, y donde no tenga que estar cronometrando los planos y pueda disfrutar de rodar.
Y hablando de las dinámicas de producción tan jerárquicas, tan verticales, ¿cómo horizontalizar los proyectos?
Me parece complicado, porque se ha perpetuado el sistema de funcionamiento del rodaje y también las escuelas nos enseñan a eso. Es como nos han educado… Aun así, me gustaría encontrar otras maneras de hacer cine. Creo que si quieres levantar financiación para hacer cine de ficción es muy difícil prescindir de estas dinámicas. Entonces todo entra en conflicto. Quiero hacer cine con presupuesto porque no quiero que mi equipo esté precarizado. Y por otro lado, necesito mostrar que lo controlamos para poder vender el proyecto.
Chiquita Piconera actualmente está disponible en FILMIN.
¡Corran a verlo ya mismo!
https://www.filmin.es/corto/chiquita-piconera
1 comments
Y no quiero llantos. La muerte hay que mirarla cara a cara. ¡Silencio! ¡A callar he dicho! ¡Las lágrimas cuando estés sola! Nos hundiremos todas en un mar de luto. Ella, la hija menor de Bernarda Alba, ha muerto virgen. ¿Me habéis oído? ¡Silencio, silencio he dicho! ¡Silencio!
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